miércoles, 18 de noviembre de 2015

Un día en el Metropolitano con la Selección Colombia

A más de 40° C y con el corazón en la mano, después de cantar el himno más emotivo que he vivido y un par de predecibles lágrimas que lo acompañaron, vi a la Selección Colombia en el Metropolitano.

Una selección Colombia inestable, que está perdiendo su estilo de juego, su identidad y sus esperanzas de ir al próximo mundial, una selección a la que le cuesta acoplarse no sólo entre sus jugadores sino también con el calor, la humedad y el terreno de barranquilla, que aunque es una fiesta completa cada vez que se viste de amarillo, afecta el rendimiento y el estado físico de unos jugadores que están acostumbrados a jugar en otras condiciones muy diferentes a las que ofrece el Metropolitano.

Fue un partido en el que se vio reflejado la inexperiencia de la mayoría del plantel y donde vimos claramente la falta de un capitán seguro dentro del equipo, un capitán que hiciera respetar la casa frente al show de los argentinos con su táctica de tirarse al piso cada 5 minutos, con lo que provecharon la desconcentración de la Selección Colombia e hicieron de las suyas como Argentina por su casa.

Un partido para olvidar, un partido que deja muchos sin sabores, pero como en la vida, la esperanza es lo último que se pierde, yo espero que nuestra Selección vuelva a tener un juego sólido, una jerarquía impecable y un equipo digno de merecer ser un sueño, así como el que cumplí ayer, fui al Metropolitano a ver jugar la Selección Colombia.






No hay comentarios:

Publicar un comentario